Como venimos denunciando hace tiempo desde UETTEL CTA, las estrategias de la empresas dentro el rubro de las telecomunicaciones para con cualquier organización colectiva de nuestros compañeras y compañeros trabajadores, se ha transformado en moneda corriente. Ya son varios los casos particulares que hemos dado a conocer y es una de las causas de conflictos más latente en el día a día de nuestro gremio.
Todas las semanas recibimos pruebas de nuestros afiliados sobre la consecuencias que deben pagar los trabajadores en sus plantas, por el solo hecho de estar bajo el paraguas de nuestra organización.
En este caso, se trata de Roberto Victor Quiroz Rocha, empleado de la empresa Tecnología y cableado SA, que a su vez opera para Telecom como otras de las tantas tercerizadas del sector.
Después de diez años de brindar servicios para dicha empresa, y tras un reclamo de nuestro Gremio con movilización a TyC por la amenaza de despido del compañero de Telefónica, la patronal comenzó una persecución económica y psicológica hacia todo aquellos trabajadores que hayan formado parte de la manifestación, especialmente sobre quienes hicieron de nexo entre los empleados y nuestro gremio, en su mayoría afiliados a Uettel a partir de aquel conflicto.
“La misma patronal empezó a sacar fotos a las personas que participamos de esa movilización”, señala Roberto y luego prosigue su relato:
“Si no te gusta lo que te pagamos te podes buscar otro trabajo”, es la forma de encasillar la precarición impuesta de parte de la tercerizada.
“Asi fueron pasando años sin aumento de ingreso por instalación ni combustible ni herramientas básicas para el normal desarrollo de la actividad y dos años sin ningún tipo de aumento en el salario de bolsillo”.
“Un día el dueño se comunica conmigo y me acusa de haber sido quien llamo a Uettel y me dijo: vos me generaste un raspón yo te voy a generar una cicatriz de 5 cm”
“Me amenazo con suspensión de 7 días sin goce de sueldo y este último mes me llevo engañado a la oficina inventando un balance de materiales para exigirme que entregue mi celular para una auditoria, bajo amenaza de llamar a la policía e iniciar una denuncia penal y a Telecom”.
Debido a esto, nuestro compañero hace dos semanas que no puede presentarse a trabajar, sin haber recibido telegrama ni cobro de salario adeudado alguno.

Desde ya, desde UETTEL CTA repudiamos y combatimos fuertemente este tipo de acciones maliciosas y acompañamos la denuncia penal realizada por el damnbificado en la comisaria de Florida Oeste.
Si bien cada caso es particular, es inundudable un patrón de conducta en común, que engloba a todas las multinacionales y sus repectivas empresas terceridas.

Como nuestra historia lo indica, accionaremos como un paraguas en defensa de nuestros compañeros y combatiremos con nuestras herramientas todo tipo de persecución o amenaza, por el simple hecho de pertenecer a un gremio o por mero hecho de organizarse en defensa de los derechos adquiridos históricamente.